Aguas de Corrientes SA emitió un comunicado confirmando que el agua potable está saliendo con “olor y sabor distinto”. Le echó la culpa a “la liberación extraordinaria de agua en la Represa de Yacyretá”. Quejas de los vecinos. La historia de un servicio privado.
Aguas de Corrientes Sociedad Anónima emitió un comunicado este jueves reconociendo que el agua potable está saliendo “con olor y sabor distinto”. Se excusó en “la liberación extraordinaria de agua en la Represa de Yacyretá”. Varios vecinos de la ciudad de Corrientes ya denunciaron problemas de salud debido a esta situación.
“El caudal del Río Paraná y la liberación extraordinaria de agua en la Represa de Yacyretá (sin notificación alguna de ese Organismo a pesar de nuestros reiterados pedidos en tal sentido) está afectando las condiciones naturales del río, situación que estaría provocando desde Ituzaingó hasta el sur de la Provincia posibles episodios de olor y sabor distintos al habitual que en breve se irán atenuando”, informó la empresa concesionaria en su comunicado oficial.
“No obstante lo cual, Aguas de Corrientes quiere transmitir tranquilidad a la población y garantiza la calidad de agua para consumo y sus condiciones de salubridad”, afirmaron los empresarios.
Sin embargo, ya son muchos los vecinos de la capital provincial que advirtieron sobre problemas de salud, principalmente estomacales, ocasionados por el consumo del agua en mal estado.
En el Bañado Norte, por ejemplo, advierten que el líquido viene con colores y un olor muy fuerte. "El agua sabe a tierra", enfatizaron.
También hay quienes aseguran sentir dolores de estómago por el beber el suministro vital. Y otros confiesan tener que hervir el agua para tomarla.
Los reclamos por el precio de la tarifa a su vez aparecen con estos episodios: "una vergüenza con lo que cobran todos los meses quién controla la facturación y ahora tenemos que tomar agua contaminada y sucia".
No es la primera vez que una situación así se da a lo largo de los 25 años que lleva la privatización de este servicio esencial para la vida de los correntinos.
Aguas de Corrientes, propiedad del empresario Pablo Chamas, comenzó con su concesión en el año 1991 bajo el gobierno de Ricardo Leconte. Desde ese momento nunca se publicitó el pliego de bases y condiciones del contrato de concesión que se firmó entre la empresa y la Provincia.
A su vez, desde el 2002 hay prorrogas que se otorgaron vía decretos por los gobernadores de turno. Esto va en contra de lo que dictamina la Constitución Provincial, que prevé la aprobación de ambas cámaras legislativas previa realización de una audiencia pública para este tipo de trámites.
Hasta el momento, Aguas de Corrientes no construyó una Planta de Tratamientos de Efluentes Cloacales, tal como se instruyó en el decreto firmado en el año 2004 por el actual gobernador Ricardo Colombi durante su primera gestión.
En el mismo se fijaba agosto del 2010 como fecha límite para la construcción de las plantas de tratamientos comprometidas en Capital y Goya. Sin embargo hasta el día de la fecha ninguna de las obras se llevaron a cabo.
Situaciones como las que se vive actualmente en la capital correntina son similares a los ocurridas en ciudades como Santo Tomé, Paso de los Libres y otras de la Costa Uruguay.
Podrido de chamullo el gobierno promete promete y en su bolsillo mante meete
ResponderEliminar